En las últimas tres décadas desde la destrucción de la unión soviética, los EE. UU. Ha cometido una serie de errores estratégicos, aunque no lo admitan ha debilitado su poder e influencia en el mundo entero. Como sabemos, después de la caída de la URSS, los Estados Unidos trataron de mantener un orden mundial basado en el dominio global, que le permitiera desarrollarse y prosperar sin impactos globales significativos.
En ese sentido el analista croata. Zoran Meter, ha mencionado en un artículo los cuatro errores estratégicos de Estados Unidos desde que se acabó la guerra fría.
El primer error según el analista es que Washington no logro normalizar las relaciones con Rusia como heredera del colapsado Imperio Soviético, no porque los dos países no quisieran o no pudieran, fue porque Estados Unidos no quería hacerlo hasta que Rusia no se sometiera y se arrodillara al dominio mundial estadounidense. Dice el analista que había muchas fuerzas influyentes en Washington, que, envenenadas por la victoria de la guerra fría, intentaron desintegrar a Rusia. Un nuevo país multiétnico con variadas religiones, territorialmente más pequeño que la Unión Soviética, aun así, era demasiadamente grande para seguir siendo el país más inmenso del planeta. Estados Unidos quería fragmentarlo en pequeños estados para poderla administrar y dominar e influir del exterior.
Una de las mayores preocupaciones de Estados Unidos era el arsenal nuclear ruso que callera en manos inadecuadas y que el comunismo no volviera a Rusia.
En 1996 Estados Unidos apoyo a Boris Yeltsin, un apoyo abierto que le dio Bill Clinton a su amigo ruso y que el partido comunista no lo recibió con mucho agrado. Se dice, que, si no es por ese apoyo de Estados Unidos a Boris Yeltsin, regresaba el comunismo en el 96.
A partir de ese momento, los Estados Unidos cometieron el error de seguir viendo a Rusia como si fuera la Unión Soviética. Pese a la gran armonía de Yeltsin y Clinton se cometió un grave error estratégico que se vio a comienzos de este milenio, cuando Putin ganó las elecciones en el 2000 y se quedaría en el kremlin por 8 años, meses más tarde gana George Bush y se queda en la Casa Blanca por 8 años.
Recordemos los atentados del 11 de septiembre. Putin fue el primer líder mundial en ofrecer su ayuda al gobierno de Bush.
Los primeros años trabajaron de la mano limando las asperezas de 50 años que dejo la guerra fría. Más tarde George Bush saco a los Estados Unidos de importantes acuerdos de armas nucleares y de misiles balísticos que tenía Estados Unidos con Rusia desde la era soviética. Pilares importantes para mantener la seguridad global y evitar una guerra nuclear entre ellos.
En el 2004 la OTAN que está controlada por Washington, empieza una oleada de acercamientos a las fronteras rusas, donde se unen países que en el pasado fueron satélites de la URSS, como Bulgaria, Eslovaquia y Rumania. Y también se adhieren países como Lituania, Letonia, Estonia. Putin se da cuenta y pilla que su amigo estaba siguiendo la política del stablissement de Estados Unidos.
El analista dice que Estados Unidos perdió para siempre la oportunidad de llevar a Rusia a las organizaciones políticas, económicas, y de seguridad occidental, es decir al círculo geopolítico occidental.
El segundo error estratégico. Recuerda que Estados Unidos en 1972 empezó un acercamiento con China para estratégicamente tratar de separar y aislar al país comunista de los soviéticos, gracias a ese acercamiento China se abre al mundo con la llegada al poder de Deng Xiaoping, y es el inicio a una nueva era.
En los 80s. China impulsa una política de modernización con énfasis en el desarrollo económico. China se convierte en una potencia financiera de inversión e industrial, que ha logrado un avance sin precedentes en la historia.
No olvidemos que en los años 90s. China era un país económicamente subdesarrollado. China se convirtió en una fábrica mundial y luego en un gigante económico y militar de nivel mundial. En tres décadas China subió a tal nivel económico de influencias y militar, hoy es el principal rival para la hegemonía de Estados Unidos, la peor noticia para Washington es que no saben qué hacer con China.
El tercer error estratégico. Estados Unidos dejo muy rápido los puntos estratégicos en Oriente Medio. Una región que pudo controlar de varias maneras geoestratégicas en términos energéticos. Hace 50 años Estados unidos convirtió a Arabia Saudita en su principal socio cuando pactaron que toda compra y venta de petróleo debía ser comprada con dólares americanos. Desde ese entonces muchos hablan de Petrodólares. Oriente Medio es una región importantísima más allá de sus recursos energéticos.
Como pierde Estados Unidos influencia en esta región, recuerden que destapan la caja de pandora cuando deciden hacer una serie de manifestaciones populares en el mundo árabe, que catalogó como Primavera Árabe. De acuerdo con el analista mencionado aquí; los Estados Unidos les dieron participación a otras potencias mundiales en esa región y empezar a luchar con Estados Unidos por influencias geopolíticas. Oriente Medio se dio cuenta que hay más lideres fuertes que Estados Unidos en el mundo. Rusia entró como mediador político y militar. China lo hizo como potencia económica y financiera.
Jugadita que Rusia y China aprovecharon en la cara de Estados Unidos, por ejemplo: La guerra civil en Siria orquestada por EE. UU., para derrocar a Bashar Al Assad, le permitió a Rusia regresar militarmente a Oriente Medio para salvar a Bashar y hacer relaciones diplomáticas con la monarquía musulmana y grandes amigos en esa región, que es lo que le molesta a los EE. UU.
China, llego ofreciendo inversión y comercio.
Por último, el cuarto error estratégico. Debido a la política mundial neoliberal que Washington ha estado siguiendo activamente en estas tres últimas décadas, los aliados europeos se dieron cuenta que podían luchar más allá por sus propios intereses que por los intereses del tío Sam, En la última década el viejo continente mostro independencia en economía y política exterior, por ejemplo: La Unión Europea ha tenido una cooperación económica con Irán (con fuertes sanciones por parte de Washington). Los europeos le abrieron la puerta al comercio de China.
En los últimos años los europeos han tenido relaciones estables con Rusia, más allá de lo bioenergética y muchos productos europeos se vendían y los fabricaban en suelo ruso.
Desafortunadamente volvieron a someterlos en este nuevo conflicto de Rusia y Ucrania.
En conclusión, los errores del tío Sam sacudieron el orden mundial existente. Les quedan dos alternativas: Transición a la multipolaridad o una batalla geopolítica para recuperar su hegemonía.
Después de esta guerra nada será igual, gane quien gane.
Por. Edvards Mercado
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