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El final de la guerra Rusia - Ucrania en manos de Estados Unidos y la UE



Para el año 2023 no se vislumbra una pronta solución o terminación al conflicto Ruso-Ucraniano, debido al fuerte interés que tiene Estados Unidos por conservar su hegemonía, imponiendo fuertes sanciones económicas, amenazando con un aislamiento completo de la escena Internacional y el poder por el petróleo, el gas y la energía.


Un conflicto prolongado y ampliado entre Rusia y Ucrania tendrá un impacto de gran alcance y arruinará el futuro del mundo y aumentará el riesgo de un control desbocado y una crisis nuclear, advierten expertos y académicos.


"El conflicto entre Rusia y Ucrania es una típica 'guerra de poder'.

El prolongado conflicto en Ucrania es inevitable, y sus problemas y conmociones se extenderán aún más a otras partes del mundo.


Los EE.UU. y la UE no han hecho esfuerzos sustanciales para aliviar el conflicto entre Rusia y Ucrania, e incluso se han movido en la dirección opuesta al proporcionar armas y municiones.


Hay tres grandes incertidumbres en el desarrollo futuro del conflicto entre Rusia y Ucrania: la confrontación militar directa entre Rusia y los miembros de la OTAN, la contaminación nuclear en Ucrania y la obligación de Rusia de usar armas nucleares. "Es justo decir que la prolongación del conflicto entre Rusia y Ucrania es el desafío estratégico más importante y la incertidumbre más seria que enfrenta el mundo hoy en día".


Ambos lados del conflicto de Ucrania están atrapados en una batalla de desgaste, lo que podría preparar el escenario para una nueva ola de escaladas.


Los académicos han analizado la dirección futura del conflicto Rusia-Ucrania y subrayado que actualmente la voluntad de las partes para negociar está lejos de ser suficiente, para Ucrania, todavía se encuentra en una etapa militar de contraofensiva, y Rusia, espera reacomodarse y recuperar su ventaja en el campo de batalla; en cuanto a Estados Unidos, continúa el apoyo militar a Ucrania a través de equipos militares avanzados, por lo que todas las partes están más dispuestas a continuar sus movimientos militares.

Wu Dahui, vicedecano del Instituto Ruso de la Universidad de Tsinghua, cree que no hay superposición entre los objetivos de negociación de Rusia y Ucrania.


Estados Unidos tiene tres objetivos en el conflicto de Ucrania: debilitar integralmente a Rusia, estabilizar el régimen en Ucrania y presionar a Europa para que siga las políticas estadounidenses, por estos objetivos imagino que será difícil encontrar una solución clara al conflicto Rusia-Ucrania en el corto plazo.


Para el año 2024 podría ser un momento crítico para resolver el conflicto, dado que los Estados Unidos como Rusia tendrán elecciones presidenciales, después de haber sido arrastradas al prolongado e intenso conflicto entre Rusia y Ucrania, y tener que lidiar con la inflación y el aumento vertiginoso de los costos de la energía.


Muchos políticos de la UE se han dado cuenta de cómo han quedado encerrados en una trampa estadounidense, la fuerte presión de los EE.UU, la Unión Europea tuvo que elegir a regañadientes, es decir, optar por su seguridad (energía y defensa) en detrimento de la seguridad energética. Altos funcionarios europeos están furiosos con la administración Biden y han acusado a Estados Unidos de beneficiarse de la crisis de Ucrania vendiendo gas a precios altos y vendiendo armas.


En el mundo moderno, los países dependen unos de otros como parte de la creciente globalización, como el petróleo y el gas, que se han convertido cada vez más en las nuevas líneas de frente en el conflicto entre Rusia y Ucrania. A medida que el conflicto se profundiza, el mundo podría entrar en una era posterior a la Guerra Fría.


Desde el colapso de la Unión Soviética en diciembre de 1991, las relaciones entre las grandes potencias se han relajado y el mundo ha entrado en una era de globalización. Sin embargo, el conflicto entre Rusia y Ucrania está devolviendo al mundo a una época de confrontación entre grandes potencias, y la verdadera rivalidad detrás del conflicto es entre Rusia y Estados Unidos.


Está claro que el conflicto entre Rusia y Ucrania es una continuación del conflicto de la Guerra Fría. Especialmente, el campo occidental liderado por Estados Unidos suprimió a otros países con la mentalidad y el hegemonismo de la Guerra Fría, se expandió con la llamada narrativa de "democracia versus libertad" y sostener su estrategia geopolítica, a fin de mantener el orden económico e internacional bajo el sistema de Estados Unidos, dice el experto Zhang Shuhua, director del instituto de ciencias políticas de la Academia China de Ciencias Sociales.


Occidente quiere los dividendos de la era posterior a la Guerra Fría, que dicta que debe debilitar a Rusia, sumir a Rusia en la guerra; para los cuatro grupos principales en Estados Unidos, el grupo de conglomerados militares, el grupo de energía, el grupo financiero y la oligarquía digital, no han estado satisfechos con las ganancias explotadas y los dividendos de guerra del conflicto de Ucrania.


Además, la mundialización es un proceso relativamente a largo plazo.


Estos factores mencionados anteriormente, tomados en conjunto, determinan el curso final del conflicto Rusia-Ucrania y la forma de terminarlo, sin embargo, la clave para resolver la crisis está en manos de Estados Unidos y la UE.


Por. Edvards Mercado



Nota: Análisis de Conferencia Anual GT 2023.


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